Si bien, hoy en día, la tinta tiene su principal aplicación en la impresión de documentos, en esta entrada veremos cómo utilizaban los vikingos la tinta.

Extraían el equivalente a tinta de plantas y animales que recolectaban de los alrededores para realizar ceremonias, enfrentar a sus enemigos o a manera de maquillaje para protegerse del sol y el clima.

Culturas guerreras, como los vikingos, exaltaban sus rasgos mediante la aplicación de polvos y tintas en la cara y cuerpo al momento de enfrentar a sus enemigos y durante sus invasiones a países vecinos, lo que los hacia lucir aun más salvajes de lo que eran.

Durante sus múltiples incursiones a los países cristianos de Europa, sorprendieron por su ferocidad y aspecto. Las guardias inglesas consideraban salvajes a las tribus del norte que los invadían constantemente y consideraban su aspecto sucio debido al maquillaje que usaban para lucir mas aterradores, en contraste, las mujeres inglesas preferían la compañía de los nórdicos ya que bajo ese maquillaje, eran más aseados que sus compatriotas.

Las culturas Maya y Azteca realizaban ceremonias en las que maquillaban con diversos colores a los esclavos como tributos a ser sacrificados para aplacar a sus dioses y servían como parte fundamental del ritual de preparación de sus doncellas.

Con el paso del tiempo y conforme surgió la necesidad de comunicarse a través de otro medios, se fueron creando los primeros símbolos como método para advertir algún peligro o señalar sitios de importancia en los alrededores.